II Marathon del Cap de Creus
Al final solo dos miembros del Club Martorell Bike acudieron a la llamada del Cap de Creus con sus paisajes de verdadero ensueño, sus calas recónditas y su paisaje volcánico, todo ello nos cautiva para venir. Solo dos valientes, Pere “Mr Acido” y el menda Diego “Black elk”, para hacer los 75km y 2.100m de desnivel que había que superar para acabar la II Maratón del Cap de Creus, prueba por equipos de 2, 3 o 4 miembros.
La prueba está inscrita dentro del campeonato de la Challenge Transpyr y además está en concreto tiene la particularidad de que se debe hacer con gps, no está marcado el circuito dado que es un parque nacional, desde luego a medida que se vaya generalizando su uso, la utilización del gps sera el futuro de las pruebas de larga distancia pues el ahorro tiempo y trabajo en marcar un circuito tan largo es ingente, además del impacto ambiental.
Por la noche no ha parado de llover, no tenemos claro como estará el terreno pero el día hoy será soleado, ni una nube. Hemos llegado muy tarde a las acreditaciones, vamos los últimos, claro somos los que venimos de mas lejos…”pero en coche” aclara Pere.. Toda la penya en el arco de salida, gran ambiente unos 53 equipos con más de 200 participantes. Nos dan un pequeño breafing y se da la salida neutralizada por el pueblo, lo que parecía que sería un apacible paseo detrás del vehículo de la organización, se convierte en una contrarreloj tránsfugo-neta. Total, que como nos hemos dormido al principio de la salida, tenemos que remontar a toda pastilla pues vamos de los últimos y estos no van a parar ya, hemos dado mucha ventaja.
Empezamos a subir dirección a la Almadrava por calles empinadas y bajadas rápidas, todo muy bonito. Impongo un buen ritmo para ir pasando a equipos y al menos dejar de tener la sensación de que no hay nadie detrás de nosotros. Después ya cogemos la pista de tierra y vamos al ritmo constante adelantando a algunos equipos, básicamente a bikers que no están tan en forma como sus compañeros y eso se nota. Hemos empezado muy fuerte, el día es bestial sol a manta y con el aire fresco de la mañana se rueda de lujo. Y encima corre aire, que bonita es la primavera.
Vamos subiendo todo el rato hacia el parque eólico de Roses, los kilómetros van pasando y el final no se ve, a cada revuelta del camino se ve más y más arriba el camino que hay que superar, las vistas son enormes. Vemos omnipresente la estación de vigilancia militar en lo más alto de todo, nos señala el desnivel que nos queda. Uf¡¡ se hace largo. Pere me comenta, no nos estamos pasando de ritmo, donde está el fuego?
Por fin bajada, pero es solo un instante debemos subir más. Esta vez es más corto y pronto llegamos a un collado donde iniciamos un vertiginoso descenso pistero hasta un desvío donde se inicia la primera de las trialeras del día…un senderito fácil, me comenta la organización. Chupado …empieza de manera divertida pero al girar una curva, pendiente abajo y piedras sueltas las que quieras, todo se mueve y es muy difícil mantenerse encima de la bici, con buen criterio mejor bajarse de la bici y no correr riesgos innecesarios que esto es muy largo, me pasa penya y Pere que baja como un tiro…abajo es más fácil y puedo llegar abajo sin más contratiempo. Llegamos a Cala Montjoi.
Ahora toca pistear con camino ancho al borde de la costa durante algunos kilómetros en ligera subida. Llegamos a un avituallamiento donde solo hay agua embotellada llevamos ya más de 20km…cruzamos una valla y ahora toca subir por pista claramente ascendente hacia el Puig d’en Manyana, donde a base de buen ritmo podemos adelantar a otros equipos. Aprieta el calor y cada vez hace mas brisa, coronamos en una valla ya conocida de la Ratpenat , es la que nos llevara por pista rápida hasta Cadaques. El descenso es largo, y se ve el pueblo al fondo, precioso. En la bajada a ratos con placas y piedras sueltas, tampoco hay que despistarse. Abajo esta Pere, salimos y va ser que no, ha pinchado y debemos reparar la rueda trasera. Sin complicaciones reemprendemos la marcha.
Paseamos pro el pueblo, pero rápidamente callejeamos para arriba en duros repechos hasta salir del pueblo y dirigimos por la carretera del Cap de Creus. Nos la conocemos bien, así que ponemos un buen ritmo, lo que nos hace avanzar a algunos equipos, ya se ve a la gente más justa. Coronamos duras rampas y llegamos a un cruce, donde esperaba encontrar el avituallamiento y tampoco aquí.
Llevamos cerca de 40 km sin comer, ahí es nada. Proseguimos ahora por camino de carros, donde se hace difícil avanzar, se hace duro pues es un continuo sube baja, un rompe pierna en toda regla. Después de una dura rampa de césped con vacas por todos lados, esto parece el Pirineo, llegamos a un cartel direccional, con indicaciones muy divertidas, donde nos hacemos una foto. Estamos en el Coll de Sa Devesa.
Pero hay que seguir, al poco llegamos ahora si, al avituallamiento, con más hambre que el perro de un ciego. Comemos todo lo que podemos, pero a sido tal el desgaste que hasta que no lo digiera no voy a recuperar las buenas sensaciones. A Pere le veo tan fresco, y lozano que asusta, está en gran forma.
Pista en revueltas y trialera de subida que hay que superar, se hace duro…pero al coronar se nos abre un sendero de aúpa, largo, larguísimo que recorre toda la montaña pelada, el paisaje es volcánico .Apenas se gana altura y se puede ir muy rápido, un sendero de ensueño. Nos vamos alegrando y el ritmo se aviva, vamos grabando un vídeo, vale la pena acercarse hasta aquí para poder hacer este tramo tan bonito.
Hay algunos repechos duros y rotos que nos anuncian que esto se está acabando, coronamos empujando la bici y comienza otro sendero este mas técnico y de terreno diferente pero también precioso, hasta llegar a una masía y comenzar una pista ancha muy cabrona, tanto que vemos a un biker con rampas en las piernas que está decidido a abandonar la prueba. El viento empieza a ser muy vivo, molesta bastante, la pista ahora ya en clara bajada nos conduce al Port de la Selva. Pero antes debemos subir otros rampotes pues nos desvían por otros caminos, otro avituallamiento liquido, donde nos dicen que el siguiente esta a 5km y hay comida…haber si hay plátanos que buena falta nos hacen al menos a mí. Ahora cogemos un sendero roto de subida, que al poco se desvía decidamente hacia abajo y se convierte en un trialera del copón bendito, de piedras, durísima bajada, larguísima, se me hace eterna. Esta sí que nos deja en el Port de la Selva , llevamos ya unos 57km de nada.
Nos vamos a siguiente avituallamiento, lo veo a lo lejos me da una rampa en la pierna y al bajarme me da en la otra, intento andar un poco para relajar la musculatura y cuando se me pasa, llegamos. Aquí está el biker de las rampas de antes, ya instalado en la furgo, comemos y nos dicen que faltan 15km pero antes hay que superar una larga subida de 6km hasta la carretera de Roses…con algún senderillo, y rampotes de plano pequeño…duro panorama.
Proseguimos ahora en modo reserva de ahorro energético, no las tengo todas conmigo y no quiero que me den rampas y menos con lo que queda, el viento de cara ahora es insufrible y se nos hace pesado luchar contra él. Pere sigue inmaculado y se le ve muy entero, yo sin embargo hasta me cuesta hablar, tengo que ahorrar energías, estoy centrado en cada pedalada y acompañarlas bien. Me parece que voy a tener que tirar de fondo de armario....Como el que no quiere la cosa después de un rato largo, coronamos en un plano y comenzamos el sendero que nos habían anunciado.
Muy bonito, las rampas duras estaban y el pateo se impone entre vegetación cerrada, se corona en todo lo alto de la montaña se trata del Puig de Vidriera, la vista es excepcional. La bajada promete emociones fuertes, bajada picadísima de piedras sueltas…un barranco en toda regla, abajo la carretera y la cruzamos. Pero esto no se ha acabado, nos meten por carretera asfalta secundaria muy abierta al viento, que azota bien, y bloquea la marcha…cosa mala, mas revueltas y salimos al cruce del Peni que cogemos por la derecha, pista divertida que nos meterá rápidamente por el camino de esta mañana. En claro descenso, nos encontramos de frente al tren que va a Cadaques desde Roses por pista de tierra, casi nos lo comemos….no veas como sube.
Salimos a otra carretera y ya divisamos Roses en toda magnitud, pero nos tenían guarda una última sorpresa un camino de paseada que se convierte en sendero y a ratos muy técnico que va serpenteando la montaña, muy divertido pero durísimo a estas alturas de la maratón. Pasamos por un mega dolmen de la Creu d’en Cobertella y un pequeño menhir. Fantástico tramo e inolvidable. Ahora toca bajar por la urbe, en eses muy marcadas, el viento dificulta las maniobras y hay que andarse con mucho cuidado. Casi te tira. Más callejeo y de repente meta…al final 80 km , el desnivel prometido y 7:17h de pedaleo.
Camiseta de regalo, con carne a la brasa recién hecha, el colofón a una jornada irrepetible, buena organización, súper amables, siempre atentos a todo y en fin que os lo la recomendamos a todos.
En la parte competitiva los 39 de 53 equipos, que no está nada mal, visto lo visto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Las fotos son un preciosas, la crónica un ejercicio de memoria magistral
Que bonito, sí señor.
Por cierto, si os pasais por nuestro blog, clickar en la publi, a ver si sacamos algo.
Otra de tus magnificas crónicas. Hacer el recorrido, hacer fotos y ademas recordar todo tipo de detalles, no es nada fácil...
Enhorabuena.
Pero que pasa....
estas cronicas no las había visto, que hacéis????
Publicar un comentario